La Amazonía, un santuario de biodiversidad amenazado
Ecuador posee un patrimonio natural excepcional y es uno de los 10 Estados con mayor biodiversidad del mundo. Esto se debe en particular a la región del Napo, cubierta por el Amazonas y rica en una flora y fauna únicas y muy diversas. En particular, sirve de santuario para especies muy amenazadas, como el lamentín amazónico y el mono araña de cabeza marrón.
Por desgracia, un auge de concesiones mineras extremadamente contaminantes está dañando sus tesoros naturales y amenazando la salud de los pueblos indígenas de la región. En 2019, había 146 minas de oro en la región.
Además de la deforestación resultante, los cursos de agua presentan concentraciones de metales tóxicos (plomo y aluminio) hasta un 500% superiores a los límites autorizados. Esta contaminación tiene un gran impacto en las comunidades que viven del agua y de los peces que pescan en los ríos circundantes. En algunos cantones, como Carlos Julio Arosemena Tola, no hay actualmente agua dulce disponible para el consumo…

Un territorio que defender sin esperar
Treecolor Alliance ha unido fuerzas con los jóvenes kichwas de la Fundación Hakhu y la Federación de Pueblos Indígenas de Napo.
Los kichwa siempre han mantenido una relación armoniosa con la naturaleza y nunca han dejado de luchar por su conservación, a pesar de los peligros y amenazas a los que se enfrentan. Las mujeres también se han organizado en patrullas de control que atraviesan el bosque.
En algunos lugares también se ha iniciado un proceso de recuperación y descontaminación del suelo para permitir la reforestación.
Por eso necesitamos ayudarles urgentemente a proteger los recursos naturales y recuperar los bosques perdidos.
Un proyecto vital para las generaciones futuras
Los pueblos indígenas que viven en la selva amazónica dependen totalmente de la naturaleza para sobrevivir. Por tanto, es esencial restaurar su espacio vital y revitalizar su economía.
Eso es lo que propone este proyecto, impulsado por la propia gente, respetando sus ambiciones y tradiciones. El proyecto pretende reforestar las zonas más degradadas aplicando modelos sostenibles de reforestación y agrosilvicultura. Esta primera fase de acción creará directamente nuevas fuentes de ingresos (agricultura, artesanía, medicina, turismo).
Objetivos a largo plazo
Este proyecto generará un fuerte impacto social y medioambiental tanto a escala local como mundial.
Se despliega en varias fases clave:
- Realización de campañas de reforestación en las zonas afectadas, utilizando conocimientos ancestrales y especies autóctonas capaces de crecer en suelos contaminados.
- Seguimiento de la evolución de las minas existentes y de los nuevos lugares de extracción
- Desarrollar fuentes de ingresos procedentes de la artesanía, la medicina tradicional, la agricultura y el turismo.